En esta acuarela había utilizado bastante tiempo tratando de lograr las luces y las sombras utilizando un sólo color, para encontrarme con algunos leves problemas de proporciones en el rostro, que le quitaban expresión. Entonces como tenía poco que perder es que tomé la opción de comenzar a hacer líneas suaves en el rostro, hasta que me pareció que podía funcionar bien en zonas más amplias, desviando la atención de los problemas que de hecho ya no veía.
Quiero decir, que en general los dibujos que no funcionan del todo bien son una excelente oportunidad para innovar.